5.1. ¿Qué es la eudaimonía?

Icono IDevice "Yo, para ser feliz, quiero un camión"

Hace ya unos años, Loquillo cantaba eso de "para ser feliz quiero un camión".Y tú, ¿qué quieres para ser feliz?

Reza un refrán popular "para gustos se hicieron los colores" y, como sucede en todas la épocas, las opiniones respecto a un tema suelen ser diferentes, cuando no divergentes. Esto mismo es los que nos sucede cuando intentamos establecer en qué consiste la felicidad y es lo mismo que sucedía en época de Aristóteles. Como ves, "nada nuevo bajo el sol".

Si analizamos con qué identificamos hoy en día la felicidad, veremos que no es muy diferente de como se hacía en época de Aristóteles. Pongamos algunas situaciones con las que nos podemos encontrar hoy en día

  • Seguro que estarás de acuerdo, que para muchas personas la felicidad consiste en disfrutar, en gozar o dicho de otra forma, estas personas ponen como objetivo de sus acciones el placer. Salir de copas, viajar, en muchos casos, no tiene más objetivo que disfrutar. Por ello, a la hora de determinar que acciones elegir, muchos optan por el placer como criterio de selección.
  • Por otro lado, otras personas, se marcan como objetivo, el reconocimiento o prestigio social o lo que en otros tiempos se definía como honor. Por ejemplo, cuanta gente "mata" por esos minutos o segundos en televisión. Si no sales en la tele, no existes.
  • ¡Qué decir de las riquezas! Está claro que muchas personas identifican la felicidad con tener mucho dinero

¿Qué nos puede decir Aristóteles a este respecto? Veremos el análisis que Aristóteles hace de estos y otros planteamientos y qué es lo que Aristóteles nos puede aportar.

Pero antes de nada, te propongo que intentes resolver algunas cuestiones a ver si eres capaz de descubir lo que pensaba Aristóteles. ¿Te animas? Si no aciertas, no pasa nada, ya que irás descubriendo lo que opinaba Aristóteles.

Señala todas las respuestas que consideres correctas

Sobre la identificación del bien con el placer Aristóteles pensaba que:
es el tipo de vida propio de los esclavos y las bestias.
 
es correcta, siempre y cuando se seleccionen los placeres más adecuados.
 
no puede ser el bien supremo, ya que por estar ligado a toda actividad humana, no es un bien independiente
 



Sobre la identificación del bien con el honor Aristóteles pensaba que:
el honor no puede ser considerado el verdadero fin, pues éste es compatible con la inactividad y la miseria.
 
es correcta, siempre y cuando, el honor esté relacionado con verdaderos méritos.
 
lo adecuado es afirmar que son los méritos personales los que constituyen la felicidad y no el reconocimiento social que los acompaña. Incluso, a veces, los méritos no son acompañados de un reconocimiento social.
 



Sobre la identificación del bien con la riqueza Aristóteles pensaba que:
sin riqueza no podemos desarrollar adecuadamente nuestra vida, así que la riqueza es el bien más importante.
 
la riqueza siempre es un medio y no un fin, por ese motivo no puede identificarse con la felicidad.
 



El tipo de vida en que consiste la eudaimonía

Imagen 12. Felicidad,
¿la vida en color rosa?


Aristóteles pretende aclarar en qué consiste el Bien, para ello realiza una crítica al planteamiento de su maestro Platón. El término Bien, al contrario de lo que opinaba Platón, no tiene una significación común a todas sus aplicaciones y por supuesto, no existe la Idea de Bien independientemente de sus manifestaciones particulares. Y si existiera, no serviría de nada en la práctica, ya que el bien para el hombre es el bien más amplio, debe ayudarnos en la vida diaria.

El Bien tiene que tener las siguientes características:
  • Debe ser un fin, algo elegido por sí mismo y no un medio para otra cosa.
  • Debe ser suficiente en sí mismo, algo que por sí mismo hace a la vida digna de ser elegida.
  • Debe identificarse con el bienestar.

La naturaleza humana y el oficio de ser hombre

Ahora tenemos que establecer estas características del ser humano, una vez encontradas tendríamos ya el bien supremo, que no sería otro que el desarrollo de tales capacidades. Según Aristóteles todo tiende a completar su fin natural y el fin natural del ser humano consiste en el desarrollo de sus capacidades.

¿En qué consiste esta característica humana?

Aristóteles afirma que debe de ser una cosa que sólo el hombre pueda hacer, y ésta es la actividad racional. El bienestar debe ser la vida de esta facultad, que debe ser actividad y no mera potencialidad, debe ser conforme a la virtud y si hay varias, a la virtud mejor y más perfecta y, además, debe de manifestarse durante toda la vida.

Pero concretemos en qué consiste la actividad racional. Para Aristóteles existe una doble dimensión de racionalidad:

  • Por un lado está la actividad calculadora de la razón o lo que se denomina la sabiduría práctica o prudencia, que orienta nuestra acción. Es el poder de la buena deliberación sobre las cosas buenas para nosotros. Es una sabiduría acerca de los detalles y que se encuentra en los que poseen una cierta experiencia de la vida, aún cuando no puedan formular principios generales.
  • Y por otro, la actividad puramente teórica, o contemplación. Es la unión de la intuición (aquella por la que aprehendemos las últimas premisas de las que parte la ciencia) y la ciencia (aquella que se ocupa de lo que es necesario y eterno y de lo que es demostrable o comunicable por la enseñanza), orientada hacia los objetos más elevados.
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