3.2. Tomás de Aquino. La síntesis de fe y razón

Icono IDevice Un aristotélico moderado
Busto de Tomás de aquino
Imagen 29. Tomás de Aquino

Tomás de Aquino (1225-1274), denominado Doctor Angélico, es el pensador más relevante de la época medieval. En él se conjuga la ortodoxia cristiana (proclamado santo por la Iglesia en 1323) y el gusto por la filosofía, a la que defendió y trató de conjugar con la revelación o la fe cristiana. Esta defensa de la filosofía, fundamentalmente de la filosofía de Aristóteles, le ocasionó que algunas de sus tesis fuera condenada por el obispo Tempier en 1277.

En su época de bachiller en París recibe la influencia neoplatónica a través de las obras de Agustín de Hipona. También recibe la influencia aristotélica por medio de Avicena y S. Alberto Magno.

En esta época en París se da un ambiente agitado por la oposición a las cátedras ocupadas por las Ordenes Mendicantes, por las disputas con los averroístas, por la pugna entre franciscanos y dominicos (Tradición agustiniana y tradición aristotélica).

La postura de Tomás de Aquino  en relación con la relación fe-razón, está relacionada con los aspectos indicados en el apartado anterior "Averroísmo latino".

Curiosamente, algunas de sus tesis fueron incluidas en la Condena de 1277, pese a manifestar siempre una postura opuesta a la denominada teoría de la doble verdad. Es bastante probable, que la inclusión de de dichas fuera debido al conflicto existente entre la escuela franciscana y el propio Tomás de Aquino.

Esta condena se mantuvo hasta el año 1325 (dos años después de la canonización de Tomás de Aquino), año en el que fue retirada la censura de las tesis tomistas, permitiendo así la libre discusión en las escuelas sobre las mismas.

Razón y Fe. Contenidos comunes y diferentes, pero no contradictorios

Frente tanto escándalo de contradicciones entre la razón y la fe, la postura de Tomás de Aquino salvará a ambas. No hay que rechazar la fe desde la perspectiva racional, ni se puede negar la validez de la teología revelada desde la investigación filosófica.

El primer paso dado por Tomás para resolver este problema, consiste en mantener una clara distinción entre razón y fe. Dicha distinción viene establecida por los límites de la propia razón, para acceder a las verdades propias de la revelación. La razón, al proceder desde el conocimiento sensible, tiene su objeto limitado a las entidades sensibles, por ese motivo el conocimiento racional de Dios es analógico e imperfecto.

Sin embargo, la fe nos trasmite conocimientos más allá de los límites de la razón, conocimientos que son otorgados de forma gratuita para completar a la razón y que de hecho no la contradicen ni la suprimen, sino que la perfeccionan. Ver texto 1

Queda claro que, para Tomás de Aquino, hay una distinción entre fe y razón, pero esta distinción no implica contradicción alguna.

El segundo paso consiste en afirmar que, a pesar de esta distinción, hay un núcleo de contenidos comunes a ambas. Es decir la razón puede acceder a algunas verdades de fe, como, por ejemplo, la existencia de Dios. Ver texto 2

Sobre cómo es posible acceder a verdades reveladas racionalmente

Para el de Aquino, es posible acceder a algunos contenidos sobre Dios por medio de la razón, aunque de forma imperfecta, ya que las cosas de este mundo, al haber sido creados por Dios, nos permiten llegar al conocimiento imperfecto de esa causa, como es por ejemplo la existencia de la causa de los seres creados, es decir de Dios. Ver texto 3

Sobre la necesidad de que verdades conocidas racionalmente sean reveladas racionalmente

Dios revela determinadas verdades accesibles a la razón ya que es conveniente que las verdades racionales en torno a Dios sean trasmitidas por la fe, dada la dificultad que entraña llegar a ellas por medio de la Razón, jugando así la fe un importante papel corrector ante los posibles errores de la razón. Ver texto 4

Sobre la posibilidad de contradicción entre la fe y la razón

Como ya te he indicado antes para Tomás de Aquino no puede existir contradicción, el siguiente texto lo refleja claramente. Por tanto no cabe una doble verdad que entre en contradicción. Ver texto 5

Sobre cómo explicar algunas afirmaciones filosofía contradictorias con la fe

Si en algunos casos se producen afirmaciones o tesis desde la filosofía que entran en contradicción con las verdades de fe, el error no está tanto en la capacidad de la razón sino en el ejercicio de esta capacidad racional por parte de los humanos.

Icono IDevice Una razón,con cierta autonomía,al servicio de la fe

En cuanto la fe y la razón constituyen fuentes de conocimientos distintos, ambas son autónomas e independientes; sin embargo en lo tocante a contenidos comunes, la razón puede prestar ayuda a la fe en la constitución de la Teología. En este sentido la fe toma de la razón los procedimientos de ordenación científica, para sistematizar los conocimientos revelados, a la vez que la dialéctica le permite enfrentarse a los errores y ataques contra la fe. Por tanto, la fe toma de la filosofía todos aquellos conocimientos y aportaciones, que sean útiles para esclarecer la fe. Por otro lado la fe sirve como elemento corrector para reconocer los posibles errores que puede cometer usando la razón. Dado que sólo hay una verdad, si por medio de la razón llegamos a conclusiones contrarias a la fe, éstas serán falsas.

Para Tomás de Aquino, la fe supone a la razón y no es contraria a ella, sino que levanta a la razón a un orden superior completándola y perfeccionándola.

Icono IDevice A modo de conclusión

Aunque, no era la pretensión de Tomás de Aquino, no cabe duda, que con este filósofo se da un paso más en la autonomía de la filosofía, que finalizará con la separación de los ámbitos de fe y razón, hecho que permitirá una mayor libertad de investigación científica. A continuación, veremos como Ockham dará otro paso en este mismo sentido. Las consecuencias de todo ello, ya las veremos cuando hablemos de la filosofía moderna.

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